Iván Cornejo y el desamor que conquistó a México (y al algoritmo)

En un mundo donde las emociones se ocultan tras filtros de Instagram, Iván Cornejo llega con la autenticidad de una guitarra, un corazón roto y una voz que no teme sonar triste. Este joven mexicoamericano de apenas 20 años no solo está redefiniendo el regional mexicano: lo está convirtiendo en el soundtrack emocional de una generación que siente profundo y llora con estilo.

Su gira Mirada Tour Parte 2 fue un fenómeno digital: entradas agotadas en cuestión de horas, colas virtuales de más de 100 mil personas y una avalancha de memes de quienes no alcanzaron boleto. Desde Guadalajara hasta Puebla, la respuesta fue clara: Iván no solo canta, conecta.

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Y es que el chico que aprendió a tocar guitarra viendo tutoriales en YouTube hoy lidera listas de Spotify, llena auditorios y pone al sierreño triste en la conversación global. Atrás quedaron los estereotipos del regional tradicional; Iván Cornejo representa una nueva masculinidad musical: vulnerable, bicultural y directa al corazón.

Con temas como Está Dañada y Intercambio Injusto, su estilo no es solo una moda pasajera, sino una evolución emocional del género. A eso súmale su aparición reciente en el show de Jimmy Fallon y su participación en cortometrajes de Apple, y es claro que Cornejo está construyendo algo mucho más grande que una carrera: está creando un movimiento.

Y aunque canta desde el dolor, su ascenso es pura alegría para quienes esperaban un artista que hablara su idioma emocional sin rodeos. En resumen: si aún no sabes quién es Iván Cornejo, probablemente ya te rompió el corazón… y todavía no lo sabes.

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